sábado, febrero 07, 2009

La Clase de Fe de Dios - Parte 3

Como Operar en la Clase de Fe de Dios

En Efesios 5:1 dice: “Sed, pues, imitadores de Dios como hijos amados.”
Justificar a ambos lados
Cuando Ricardito, mi hijo mayor, tenía tres años, empezamos la escuela dominical para niños. Las maestras nos contaron que Ricardito se había parado en una silla y se había puesto a predicar, pues quería hacer lo que su papá hacía siempre en los servicios.

Así son los niños, siempre imitan a sus padres.

Eso es lo que nos dice este pasaje; debemos imitar a Dios, tal como un niño imita a su papá. Debemos hablar como Dios habla, y debemos hacer lo que Dios hace; debemos convertirnos en sus imitadores.

En 2 Corintios 4:13 dice: “Pero teniendo el mismo espíritu de fe, conforme a lo que está escrito: Creí por lo cual hablé, nosotros también creemos, por lo cual también hablamos.” En este pasaje vemos la característica del espíritu de fe: Cree y Habla. Si tu quieres tener el espíritu de fe debes creer y hablar la Palabra de Dios.

En Romanos 10:10 vemos como actuar en la clase de fe de Dios: creer con el corazón y confesarlo con la boca.

Es muy interesante en la historia de la mujer que tenía el flujo de sangre (Marcos 5:25-34), que ella estaba diciendo continuamente: “Si tan solo toco su manto seré sana, si tan solo toco su manto seré sana, Si tan solo toco su manto seré sana.” Ella tenía el espíritu de fe, e iba diciendo esto una y otra vez, hasta que la fe se levantó para recibir su milagro, fue tocó su manto, y recibió la sanidad que había estado declarando con sus palabras. Ahí está el secreto de su sanidad: sus palabras.

Si tu crees lo que la Palabra de Dios dice, y empiezas a confesarlo con tu boca, tendrás las cosas que deseas recibir de Dios.