martes, julio 17, 2007

Las 6 Cosas Más Importantes en la Oración

Número 4
Depende del Espíritu Santo en tu Vida de Oración


Romanos 8:14
14 Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, éstos son hijos de Dios.

Los hijos de Dios somos guiados por el Espíritu Santo.

Dios quiere que dependamos del Espíritu Santo en cada área de nuestras vidas y eso incluye nuestra vida de oración.

Romanos 8:26-27
26 Y de igual manera el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad; pues qué hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles.
27 Mas el que escudriña los corazones sabe cuál es la intención del Espíritu, porque conforme a la voluntad de Dios intercede por los santos.

El Espíritu Santo nos ayuda a orar de manera eficaz.

A veces no sabemos como o por que orar, por eso necesitamos del Espíritu Santo para que nos enseñe el motivo y la manera en que debemos orar.


Juan 14:15-17
15 Si me amáis, guardad mis mandamientos.
16 Y yo rogaré al Padre, y os dará otro Consolador, para que esté con vosotros para siempre:
17 el Espíritu de verdad, al cual el mundo no puede recibir, porque no le ve, ni le conoce; pero vosotros le conocéis, porque mora con vosotros, y estará en vosotros.

La palabra Consolador es la palabra griega parakletos (parakletos), que entre otras cosas significa ayudador.

El Espíritu Santo es nuestro ayudador, es quien nos ayuda a tener oraciones exitosas.


Una traducción literal de Romanos 8:26 es esta: “El Espíritu mismo hace intercesión por nosotros en lenguaje que no puede expresarse con lenguaje articulado.”

1 Corintios 14:2,14-15
2 Porque el que habla en lenguas no habla a los hombres, sino a Dios; pues nadie le entiende, aunque por el Espíritu habla misterios.
14 Porque si yo oro en lengua desconocida, mi espíritu ora, pero mi entendimiento queda sin fruto.
15 ¿Qué, pues? Oraré con el espíritu, pero oraré también con el entendimiento; cantaré con el espíritu, pero cantaré también con el entendimiento.

En el verso 2 vemos que la persona que ora en lenguas esta orando misterios por el Espíritu Santo. Es decir habla por el Espíritu Santo.

Los versos 14 y 15 nos dicen que no debemos conformarnos con orar únicamente intelectualmente; debemos orar también con el Espíritu Santo.


Otro motivo para orar en lenguas lo encontramos en Romanos 8:26, donde dice que no sabemos pedir como conviene. Nosotros no sabemos, pero el Espíritu Santo si lo sabe y quiere ayudarnos a orar correctamente.

Dependamos del Espíritu Santo para poder orar de manera eficaz.